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La necesidad del Profesor de Servicios a la Comunidad (PTSC) en la red de orientación de la Comunidad de Madrid, o ¿para qué sirve un oso?

La necesidad del Profesor de Servicios a la Comunidad (PTSC) en la red de orientación de la Comunidad de Madrid, o ¿para qué sirve un oso?

Carlos L. Sánchez. Arroyo y Marta Veguillas Ocaña

P.S.C y miembros de la Junta directiva de la AMPTSC

Asociación Madrileña Profesores Técnicos de Servicios a la Comunidad.

La primera cuestión por tratar es: ¿Qué somos los/as Profesores/as de Servicios a la Comunidad? Somos profesionales docentes funcionario/as de carrera o interino/as del cuerpo de secundaria con responsabilidad de docencia directa en Formación Profesional y que dentro de la red de orientación de la CM tenemos funciones técnicas relacionadas con la orientación socioeducativa prioritariamente con familias en situación de vulnerabilidad. (este concepto lo desarrollaremos más adelante)

La segunda cuestión es: Somos profesionales docentes escasos, muy escasos, por debajo de las necesidades reales de los centros educativos, sin la capacidad de bilocación que tenía Santa Águeda. no tenemos la capacidad de multiplicar los panes y los peces, ni hacer del agua, vino. Es decir, no somos generadores de recursos (de ayudas, becas, prestaciones…), ni los administramos. No tenemos una varita mágica que solucione los problemas de los alumnos y sus familias. Como profesionales usamos básicamente nuestras capacidades técnicas.

Somos técnicos/as docentes que utilizamos la entrevista (En sus diferentes vertientes; informativa, familiar, terapéutica…)  como arma básica de trabajo para conseguir que las familias de los alumnos y estos mismos movilicen sus propias competencias y capacidades personales. Profesionales docentes que trabajamos coordinados con los recursos de la comunidad dentro de los Equipos de Orientación Educativa y psicopedagógica que intervienen en los Centros de Educación Infantil  (1º ciclo de EI, los llamados EAT ) en los Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP que tiene el 2º ciclo de EI y toda la etapa de EP, los denominados EOEP), y en los Departamentos de Orientación  de algunos (pocos) Institutos de Educación Secundaria Obligatoria (IES) así como en todos los Centros Públicos  de Educación Especial, Unidades de Formación e Inserción Laboral (UFILs), y algún destino específico más.

Los  Profesores/as de Servicios a la Comunidad (PSC) somos profesionales que formamos  parte de un equipo interdisciplinar, y que, gracias a  nuestra diversa formación, estamos especializados en “lo social”, y por ello nuestras actuaciones están dirigidas, entre otras, a reducir, prevenir y/o mejorar situaciones de riesgo social, personal o familiar que inciden negativamente o impiden el desarrollo normalizado del proceso de enseñanza-aprendizaje del alumnado, así como a compensar las desigualdades del mismo.

En otras palabras, nuestro trabajo consiste en intervenir en las situaciones de vulnerabilidad del alumnado y sus familias colaborando con los recursos comunitarios. De esta función tan compleja se extraen funciones propias de la figura del PSC, que quedan recogidas en la normativa actual como son: La ORDEN sobre funcionamiento de los EOEP publicado en el BOMEC del 13/5/96 y la RESOLUCIÓN de 29/04/96 sobre el funcionamiento de los Departamentos de orientación en IES.

Vamos a resumir de forma breve algunas de ellas: colaborar con los servicios externos en la detección de necesidades sociales y necesidades de escolarización del alumnado. Actuar como mediador entre las familias del alumnado y el profesorado, proporcionar una formación y orientación a las familias y participar en su desarrollo. Proporcionar criterios para que el plan de acción tutorial y el plan de orientación académica y profesional atiendan a la diversidad social, con necesidades específicas de apoyo educativos… Estas funciones son entre otras:

  • Coordinación entre los servicios educativos que actúan en el sector, Coordinación con los Equipos Generales, de Atención temprana y Específicos, para planificar la actuación conjunta que mejoren la respuesta educativa al alumnado y sus familias, determinar las necesidades educativas especiales del alumnado
  • Colaborar en la realización de la evaluación psicopedagógica del alumnado que pueda presentar necesidades específicas de apoyo educativo
  • Coordinación con otros Servicios del Sector, con servicios sociales, sanitarios, colaboración en el desarrollo de programas de prevención, seguimiento y control de absentismo escolar, colaborando con los equipos docentes determinación de las necesidades de compensación educativa del alumnado.

Como podemos comprobar, en estas funciones se repite las palabras “necesidades” y “social”. Ambos términos hoy en día se centran principalmente en solventar o disminuir en el alumnado dificultades de integración social, inclusión educativa, fracaso escolar, absentismo, maltrato infantil, entre otras. Todas ellas conforman una problemática escolar y social que se materializa en la actualidad en forma de acoso escolar, problemas de salud mental y otras formas de violencia en los centros escolares. ¿A qué nos suena todo esto? Evidentemente a un concepto utilizado en las ciencias sociales desde hace décadas, y en España sobre todo a partir de la pandemia. El concepto de VULNERABILIDAD SOCIAL. Que introduce la noción de riesgo como elemento constitutivo esencial de la vulnerabilidad social, y la vincula además a la vivencia de situaciones de fragilidad, precariedad, indefensión o incertidumbre. Este nuevo marco conceptual es muy adecuado, en un momento en el que el Estado de Bienestar (tal como se entiende en Europa Occidental desde el final de la II guerra Mundial y en España desde la Transición democrática) está en franco declive, y especialmente en los ámbitos de la sanidad y la educación ya que desde las corrientes políticas de carácter conservador  se tiende a un estado de bienestar de corte anglosajón o más exactamente norteamericano en el que se reduce la educación y la sanidad pública a mínimos. (Entre otros muchos derechos sociales)

Esto nos lleva a plantearnos la siguiente cuestión:

Los PSC somos funcionarios/as sujeto a normativa. (De forma directa a la normativa educativa, de forma secundaria a la normativa relacionada a política sociales en relación a las familias, …)  Que en el caso de la educación Primaria tenemos bajo nuestra responsabilidad todos los centros de Primaria del sector (una o varias localidades responsabilidad del EOEP de sector) y en secundaria normalmente dos IES en la misma o en localidades distintas. Y esta organización del trabajo nos lleva a la paradoja de; o AUMENTAN EL NUMERO DE PROFESORES DE SERVICIOS A LA COMUNIDAD DESTINADOS A LA RED ORIENTACIÓN EN LA COMUNIDAD DE MADRID CON UNA RATIO IGUAL A NUESTROS COMPAÑEROS ORIENTADORES, o nos dotan a los escasos profesores/as de servicios a la comunidad destinados en la misma del santo don de la BILOCACIÓN Y ESO ES IMPOSIBLE. Ya que como se denota del concepto de VULNERABILIDAD SOCIAL, los alumnos y sus familias en esa situación ESTÁN EN TODOS LOS CENTROS EDUCATIVOS Y EN TODAS LAS ETAPAS EDUCATIVAS, y que, desde la pandemia, aumentan de forma exponencial entre otros factores que sería largo analizar, por los problemas relacionados con la salud mental infanto juvenil.

Y ahora vamos a la tercera cuestión: ¿PARA QUE SIRVE UN OSO?

Responder a esta cuestión no es sencilla, ya que, como los osos, los Profesores/as de Servicios a la Comunidad necesitamos un ecosistema sano y equilibrado. Un oso precisa un ecosistema protegido por la LEY, básicamente montañoso, con bosques, ríos y fuentes con aguas no contaminadas, etc. Un profesor/a de servicios a la comunidad, es más, cualquier funcionario/a docente necesita que se proteja el ESTADO DE BIENESTAR, que se apueste por una red educativa publica como en el resto de Europa occidental (Desde Italia hasta Finlandia, todos los estados democráticos europeos apuestan por una educación pública de calidad )y no como en España con esa red de centros educativos DUAL publica/concertada, que en el fondo mantiene la diferencia social en educación desde las políticas educativas de la CM generando desde la administración pública autonómica guetos educativos.

El oso es un barómetro de la calidad del ecosistema natural. (A más población de osos más calidad del ecosistema natural) En el caso de los Profesores/as de Servicios a la Comunidad, a más profesionales de este perfil más desarrollo del Estado de Bienestar. El sistema educativo volvería a posibilitar el ascenso social, En el fondo se trata de aplicar la JUSTICIA SOCIAL sobre la que se basa el ESTADO DE BIENESTAR.

Por último y sin que sirva de precedente recomendamos la visión de la película ¿PARA QUE SIRVE UN OSO? Entre risas y tal tiene algo de mala leche. Y en nuestro caso particular como el biólogo romántico e idealista protagonista de la película nos sentimos a contracorriente, románticamente idealistas en lo que se refiere a la defensa de la necesidad de nuestro perfil profesional en la red de orientación y a la defensa del Estado de Bienestar.

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